Para esta actividad he decidido escoger mi oficina ya que es el sitio que más estoy durante la semana. El recorrido es bastante sencillo, consiste en ir del despacho de mi jefe a la sala de fotocopiadoras, que resumidamente podría ser “al fondo a la derecha”.

La indicación más detallada sería, sales de la oficina sigues todo recto pasas el ascensor cruzas dos puertas grandes y a mano derecha encontrarás la oficina de las fotocopiadoras.

A continuación veréis el plano realizado para esta actividad, en él, se pueden ver salas que también intervienen en el recorrido, como la sala de regiduría, el ascensor y la sala de la secretaría de mi jefe.

Dado que esta parte de la oficina está ocupada mayoritariamente por personal familiarizado con el edificio, no ha sido necesario añadir señalización adicional para navegar de una oficina a otra. Sin embargo, hay dos señales presentes: una indica la ubicación del ascensor y la otra dirige hacia el piso superior, con advertencia de acceso restringido para el personal no autorizado.» Es cierto que la señalización adecuada ayudaría a que las personas externas que vienen a hacer reuniones al departamento pudieran situarse de forma más cómoda con el apoyo de la señalización adecuada.

En este mapa también se han marcado las puertas y las ventanas que solo se encuentran en la sala de regidores y el despacho de mi jefe.

Gracias a la realización de esta actividad he podido profundizar sobre la necesidad de la inclusión de la señalética destacando la necesidad de que sea clara y fácilmente comprensible para todos los usuarios. Con el objetivo de mejorar su experiencia, su comodidad y complicidad con el entorno.